El padre Teófano Stablun nació el 15 de octubre de 1915 en Bressanone, Italia. El 16 de junio de 1940 se ordenó sacerdote de la Orden de Frailes Menores, franciscana. Trece años después, el 4 de septiembre de 1953, a los 37 años, arribó a Ingeniero Jacobacci para misionar en la Línea Sur, que abandonó sólo cuando su salud se quebrantó en el año 2000. Al año siguiente falleció en Italia, el 14 de septiembre de 2001 a los 83 años.

El padre tuvo un paso evangelizador durante 43 años por la región, con un estilo único: nada lo paraba en sus objetivos. Nunca se cansó de recorrer la Línea Sur, con su sotana marrón descolorida por el sol, raída por las espinas de los montes y con su rastrojero destartalado, pero que le permitía llegar a todos lados. Así lo recuerda su gente.

“Para mí es una alegría como obispo, porque es el regreso de los restos a este lugar, de alguien que luchó, trabajó, camino y anduvo las rutas de estas tierras y por lo tanto, es devolverlo a su gente, que lo recuerda con mucho cariño. Él dio su vida acá, construyó capillas, hizo caminos, buscaba agua para la gente y alentó la fe y la vida de muchos”, expuso a El Cordillerano el obispo Chaparro una vez finalizada la misa.

Dijo que en los pueblos de la Línea Sur la gente está esperando la llegada de los restos de Stablun y que se ha elegido Los Menucos debido a que es una de las localidades donde el padre dejó más impregnado su legado. Allí, se realizará una celebración en la parroquia Sagrado Corazón de Jesús, el que será su destino final.

Chaparro contó que los habitantes de los parajes de la Línea Sur, pidieron que Stablun “regrese” a sus pagos por el cariño grande, incluso impulsaron que la Legislatura de Río Negro lo declare ciudadano ilustre de la Provincia.

“Además, estamos cumpliendo un deseo de Stablun que era quedarse acá, con su comunidad. Para nosotros pastores, esto es muy importante. Porque más allá de las maneras, del estilo de cada uno, nosotros sentimos que fue un pastor entregado y eso nos alienta mucho. Ojala sirva para nuestras comunidades, para seguir alentando y seguir sus pasos. Esto nos demuestra que son personas importantes para nuestra misión”, consideró Chaparro.