El drama sigue siendo parte de un Dakar, y apenas en el segundo día de carrera ya hubo un episodio de esas características, aunque sin consecuencia física alguna para su protagonista. El caso es el del argentino Pablo Busin, que sufrió una caída de las consideradas como "normales", pero sin embargo su moto se incendió y quedó completamente destruida.
El accidente ocurrió entre el WP1 y el WP2 de la segunda etapa. Busin había tenido problemas para arrancar su moto en el campamento de salida, y había debido traspasar la pancarta de largada con el motor mudo, para luego dedicarse a solucionar el problema. Lo lograron con sus mecánicos, pero apenas unos 20km después, cuando volvió a pararse. El piloto rionegrino lo solucionó una vez más y retomó la marcha, pero una caída fue el detonante de un incendio que no pudo apagar, y todo se derrumbó.
Su testimonio:
"Intenté apagarla con tierra y arena pero mis compañeros que iban llegando, me alejaron de la moto porque era muy peligroso. Tenía 35 litros de combustible y las bengalas, que podían explotar en cualquier momento. A la mañana no arrancaba, estuve con tres mecánicos intentando darle marcha. Pasé el control con el motor apagado y la pudimos arrancar después. Hice unos 20 kilómetros y se volvió a parar. Le hicimos un ByPass y salió otra vez, pero algo no estaba bien. Seguí despacio y buscando el WP2 no ví una ondulación. Me caí y al caer agarró fuego inmediatamente. No la pude siquiera agarrar para pararla. Estoy muy triste."

22 octubre 2019
Interés General