12 noviembre 2012 Interés General Comentar

La medida está fundada en la falta de compromiso de las dirigencias de ambos clubes y de la Liga Rionegrina de Fútbol al momento de afrontar las consecuencias de los últimos clásicos que se jugaron en Viedma, que incluyen destrozos y la conducta violenta de parte de las hinchadas de los dos clubes.
En base a ello, y a que ninguno de las entidades se responsabilizó simbólica ni materialmente por lo sucedido, es que la Jefatura de Policía sugirió a la Liga Rionegrina de Fútbol la suspensión del partido.
La determinación, firmada por el jefe de Policía, Ariel Gallinger, se funda en “las malas experiencias de los cotejos llevados a cabo en el transcurso del año, donde se registraron numerosos hechos delictivos contra la propiedad privada”, totalizando 14 denuncias contando rotura de vidrios particulares, de instituciones y vidrieras de Viedma.
“Como es de público conocimiento, desde la Jefatura se solicitó a las instituciones participantes la indemnización correspondiente en beneficio de los damnificados, pero no se obtuvo ninguna respuesta a la fecha”, indica la nota y acota que existen “innumerables quejas de los vecinos por los hechos aludidos que se producen ante la realización del evento”.
Por último, Gallinger le propone a la Liga Rionegrina de Fútbol “consensuar medidas de seguridad acordes a las características del cotejo y sus posibles consecuencias, permitiendo abordar este tipo de problemática de una manera especial”, para que la entidad asuma un rol activo en la seguridad del encuentro.
La notificación fue enviada hoy a las dirigencias de ambos clubes y a la Liga.