Esta mañana comenzó en los Tribunales de Roca el juicio por jurados por el femicidio de Marisa Coliman y la tentativa de homicidio de su hijo, hechos ocurridos en la localidad de Luis Beltrán en julio de 2023. El proceso se desarrolla bajo la modalidad de jurado popular, con la presencia de 12 personas seleccionadas para evaluar las pruebas.

Tras las indicaciones iniciales del juez técnico, se dieron inicio los alegatos de apertura a cargo de la fiscalía, la querella y la defensa. La acusación expuso su teoría del caso, señalando que el imputado habría atacado a Coliman en su vivienda con un cuchillo, con la intención de causarle la muerte. Según lo planteado, las heridas provocadas fueron múltiples, una de ellas afectó la arteria carótida izquierda y derivó en una hemorragia fatal.

El Ministerio Público Fiscal indicó que el ataque se produjo mientras la víctima estaba acostada y también cuando intentó salir de la vivienda. Posteriormente, de acuerdo con la acusación, el imputado habría agredido al hijo de la mujer en un intento de asegurar su impunidad. Por estos hechos, la fiscalía encuadró la acusación en los delitos de tentativa de abuso sexual con acceso carnal, homicidio doblemente agravado por ensañamiento y por violencia de género, y tentativa de homicidio agravado, en concurso real.

Para sostener la acusación, la fiscalía anunció la declaración de testigos clave, entre ellos el hijo de la víctima, integrantes de su familia, personal policial que intervino en el lugar, profesionales de la salud que constataron el deceso y especialistas forenses. Además, se sumarán aportes del Gabinete de Criminalística, la Brigada Rural, áreas judiciales de la Policía y peritos del Ministerio Público que trabajaron sobre teléfonos celulares y otros elementos secuestrados.

La querella particular adhirió a la presentación de la fiscalía, mientras que la defensa penal pública sostuvo una versión distinta de los hechos. El defensor planteó que no es posible atribuir responsabilidad al imputado en el marco del tiempo y las circunstancias en que se desarrollaron los hechos, e instó al jurado a observar con atención las pruebas fílmicas y los testimonios que se incorporarán en el debate.

El juicio corresponde al vigésimo tercero bajo esta modalidad en la provincia de Río Negro. Durante las audiencias, que continuarán toda la semana a partir de las 8:30, se prevé la participación de 40 testigos presenciales y remotos, además de la incorporación de pericias, documentos y registros audiovisuales.