Un juez de Garantías resolvió prorrogar por cuatro meses la prisión
preventiva de un hombre acusado del homicidio agravado por ensañamiento de Gerardo Romero, ocurrido el 7 de agosto en Viedma. La medida se renovó este
jueves, al cumplirse el plazo inicial de tres meses dispuesto al momento de la
formulación de cargos.
Según la acusación presentada por el Ministerio Público Fiscal, el imputado
habría citado a la víctima en su vivienda con el pretexto de concretar una
transacción vinculada a estupefacientes. En ese encuentro, presuntamente le
provocó una fractura de cráneo y posteriormente le causó 24 heridas con un arma
blanca, que le produjeron una hemorragia fatal.
Durante la audiencia, la Fiscalía detalló que la investigación continúa en
desarrollo con distintas diligencias en curso, entre ellas el análisis de
teléfonos celulares, pericias toxicológicas y cotejo de rastros genéticos.
También se llevan adelante estudios del Cuerpo de Investigación Forense y se
avanza en la reconstrucción virtual del hecho mediante un escaneo
tridimensional del lugar.
Además, se analizan registros de llamadas, localizaciones de antenas,
cámaras de seguridad, operaciones realizadas a través de Mercado Pago y los
elementos secuestrados en el domicilio —entre ellos armas, prendas de vestir y
muestras biológicas— que fueron enviados al Laboratorio Regional de Genética
Forense. La Fiscalía informó que el imputado fue sometido a una evaluación
psiquiátrica, la cual descartó afectaciones en su salud mental.
La prórroga fue solicitada por el Ministerio Público al considerar que
persisten los riesgos procesales que motivaron la prisión preventiva inicial.
Se señaló que el acusado no tiene arraigo en la ciudad, residía en Viedma desde
hacía poco tiempo, no contaba con trabajo estable y cambiaba con frecuencia de
domicilio. También se planteó el riesgo de entorpecimiento de la investigación,
ya que algunos testigos son vecinos del acusado y podrían sentirse presionados.
En el lugar del hecho se halló una valija con ropa, lo que reforzaría la
hipótesis de una posible fuga.
La Defensa Pública no formuló oposición al pedido fiscal. Tras evaluar los
argumentos, el juez resolvió extender la prisión preventiva por cuatro meses
más, fundamentando su decisión en el riesgo de fuga y en el estado actual de la
investigación, que aumenta el grado de sospecha sobre la presunta participación
del imputado en el hecho.

4 diciembre 2025
Judiciales