Números en marcha

Comentar

La contundencia que logró la movilización de trabajadores realizada el jueves en Viedma, alcanzó para darle rango de histórica. Enrolados en la CTA Autónoma, la CTA de los Trabajadores y la CGT Zona Atlántica, más de 15 sindicatos pudieron hilvanar un espacio que los contuviera.

La convocatoria obliga a remontarse, por lo menos 20 años, para computar similar nivel de participación. Para los organizadores hubo 10 mil manifestantes, para el gobierno poco más de 2 mil. Misma distancia que lo solicitado y ofrecido en la discusión salarial.

Un mes antes comenzaron los contactos entre los diferentes gremios que componen las 3 centrales, lograron confluir con dispar intensidad el día de la movilización. Mucho tuvo que ver el secretario Adjunto de UNTER, Marcelo Nervi. Fue él quien, junto a Pablo Barreno de SITRAJUR, comenzó a comunicarse con el resto de los sindicatos para articular las primeras reuniones. Nervi volcó su experiencia para que, en el recorrido y la concentración final, nada se salga de cauce. No hubo pintadas ni agresiones de ningún tipo en organismos provinciales.

También hay que dar crédito a Gabriel Garnica y Damián Miler, de Empleados de Comercio y UOCRA respectivamente. Ellos no cejaron ante los intentos de que la CGT no marche junto a las dos CTA.

El sindicato de Garnica, a nivel nacional, decidió no adherir al paro general bajo la excusa de haber alcanzado un 20 % de aumento para este año.  El referente de la CGT Zona Atlántica, sin aportar gente, brindo el marco para que esta movilización se pueda llevar adelante como un frente de trabajadores.

La demostración de fuerza más importante la realizó ATE, con su secretario General, Rodolfo Aguiar. Pudo el coordinador de la CTA Autónoma de Río Negro, con su frase: “Pará la mano Alberto, que Macri no te pide tanto”, recoger aplausos y hacerle un guiño a la oposición allí presente. Fue un claro intento de asociar al Gobernador con el ajuste que lleva adelante el presidente.

Un párrafo especial merecen las ausencias. UPCN, con Juan Carlos Scalesi a la cabeza, solo se plegó al paro. Los bancarios, conducidos por el legislador oficialista Rodolfo Cufré, finalmente no movilizaron. De igual forma actúo el gremio del personal legislativo que conduce Alejandro Gatica, quien en los próximos días será llamado a brindar declaración indagatoria en una causa por defraudación a la administración pública por el manejo del Fondo para la Vivienda y el Turismo Social del Personal Legislativo, creado por Resolución el Parlamento rionegrino.

Los motivos de la protesta fueron tan amplios como, en algunos casos, contradictorios. Desde la “interrupción de aumentos desmedidos de tarifa”, “el ajuste y achique del Estado”, “las paritarias sin techo y aumentos salariales reales, acordes a la inflación” y el “cese de subsidio a las grandes corporaciones, usando como variable de ajuste el salario de los trabajadores”, hasta el “rechazo al endeudamiento de la Provincia mediante el Plan Castello” y “el fin de la precarización laboral”, en relación a los becados de desarrollo social.

Las potenciales obras que prevé el Plan Castello seducen a los trabajadores de la UOCRA. Los reclamos además se mezclaban entre lo que se le solicita al Gobierno Nacional y lo que se le demanda al Provincial. Como en el tango, las consignas quedaron revolcadas en un mismo lodo.

Si bien la mayoría iban dirigidas al rumbo económico del gobierno que encabeza el presidente Macri, las demandas, los estatales rionegrinos, se la realizan a su propia administración. Allí radica hoy el principal problema de Weretilneck.

La coyuntura nacional lo arrastra. Armó un espacio político de neto corte provincial y lo ancló a la estructura estatal que conduce. Juntos Somos Rio Negro, en su génesis, en los albores de 2015, se autoproclamó “en defensa de los intereses del pueblo rionegrino”. En aquella oportunidad, se enfrentó al gobierno de Cristina Fernández de Kirchner por el descuento de 30 millones de pesos de coparticipación, que la Nación realizó a la Provincia en concepto de intereses por la deuda que mantiene con aquella.

Este elemento contribuyó al ascenso en las encuestas que luego se materializó en el 52% de los votos obtenidos para su reelección. Hoy, lo endeble de las arcas públicas, producto de la caída de la Coparticipación Federal, le impide a Weretilneck salir a despegarse de la política económica que lleva adelante Macri por temor a represalias.

En un tránsito donde no se han despedido trabajadores estatales, se está concretando el pase a planta permanente de 5.000 agentes, el Gobierno rionegrino recibió los mismos reclamos que las empresas o gobiernos que han reducido personal. Cuando llegó al poder en enero de 2012, la masa salarial estatal representaba 300 millones de pesos. Hoy, con 1.300 millones, se registra un aumento del 470% por ciento en menos de 6 años. La inflación erosionó los reconocimientos o conquistas salariales, según la óptica con la cual se lo mire.

En lo electoral, este domingo se eligen 15 convencionales en Catriel para reformar la carta orgánica municipal. Cinco listas compulsaran por los lugares. La del Movimiento Vecinal de Integración y Cambio - MOVIC- que representa al oficialismo municipal. El Partido Justicialista y la Unión Cívica Radical serán de la partida con sus clásicos números  2 y 3 en la boleta. Todo indica que la fuerza local del intendente Carlos Johnston se impondrá con comodidad seguido por el PJ. Esta elección además marca la defunción del Frente Progresista en Rio Negro. La  Coalición Cívica CC-ARI y el socialismo también participan, pero cada uno por su lado. 

El tiro final lo asestó Magdalena Odarda, cuando manifestó la “posibilidad” de un acuerdo electoral con JSRN que la lleve como candidata a Diputada Nacional. Esto marca un claro límite para el socialismo que, en la semana, saldrá a expresar su disconformidad. Crónica de una disolución anunciada.

Desde el Gobierno se hacen los desentendidos. Los que menos lo quieren, aducen que es una jugada del vicegobernador pensando en el 2019. Difícil que Pesatti explore semejante alternativa sin el consentimiento del primer mandatario provincial.

La realidad es que la Senadora tiene el quinto nivel de conocimiento más alto dentro de los dirigentes rionegrinos, egún un estudio que baraja la gente de Cambiemos. El Gobernador tiene 100% de conocimiento, luego vienen los peronistas, Miguel Pichetto, 97,1%; Martín Soria 95,7%; y María Emilia Soria 87%. Muy cerca se encuentra Odarda con 81,9 %. Pesatti ronda el 60 % y con menor caudal aún se encuentra Alejandro Palmieri. El dato significativo es que la líder del Ari junto a Weretilneck son los únicos que superan el 50% por ciento de imagen positiva. Los 4 meses que restan hasta las PASO del 13 de agosto estarán cargados de números, porcentajes y especulaciones, con sus respectivas marchas y contramarchas.

 

 

 

 

También te puede interesar...