El Consejo Federal Pesquero aprobó una reserva social de 1.200 toneladas de langostino para Río Negro, que deberán ser descargadas y procesadas exclusivamente en plantas de la provincia. La medida busca reactivar la actividad pesquera, fortalecer la economía portuaria y atender la situación laboral en San Antonio Oeste y su zona de influencia.

La asignación corresponde a la temporada 2025 y fue solicitada por las autoridades provinciales en el marco de la emergencia pesquera declarada en mayo de 2023. Dicha emergencia respondió a una caída sostenida de la actividad y el empleo en el sector, afectando a las y los trabajadores vinculados a la industria en distintos eslabones de la cadena productiva.

Si bien la solicitud original contemplaba un volumen mayor, de 3.500 toneladas, el Consejo resolvió por mayoría otorgar este primer cupo como reconocimiento a la situación crítica que atraviesa la provincia. Se trata de una medida con impacto directo en el sostenimiento y posible recuperación del entramado productivo local.

El langostino constituye uno de los recursos más demandados por la pesca nacional. Su valor estratégico radica en su rápido ciclo biológico, alta tasa de crecimiento y potencial de reproducción, características que permiten planificar procesos de captura y procesamiento con valor agregado en origen.

Desde la provincia destacaron que esta decisión permitirá no solo sostener los niveles de actividad en las plantas locales, sino también avanzar en el fortalecimiento de la infraestructura portuaria, mejorar las condiciones laborales del sector y promover el desarrollo económico en zonas afectadas por la emergencia.

La descarga y procesamiento en territorio rionegrino responde a una estrategia de desarrollo regional que prioriza el arraigo de los beneficios económicos derivados de los recursos marítimos en las comunidades costeras.