“Nuestra preocupación por la inseguridad no se circunscribe a una campaña electoral, como sí lo es para otros sectores políticos- porque permanentemente trabajamos para conseguir las herramientas necesarias para revertir las situaciones que se viven”, dijo el Jefe comunal.

Adelantó que la semana entrante mantendrá una audiencia en el ministerio de Justicia de la Nación, con el fin de obtener fondos para poder colocar más cámaras de seguridad en la ciudad durante el 2014, así como un completo centro de monitoreo.

No obstante, aclaró que “esto debe complementarse con acciones desde el punto de vista social”.

En ese aspecto “es donde debemos poner ahora mucho hincapié, fortaleciéndose la tarea no solamente con la implementación de talleres deportivos y culturales, sino con trabajos más profundos. Primeramente diagnosticando e individualizando los casos, focalizando la acción concreta en los grupos de mayor riesgo.

“Entiendo que hay que darle un viraje a lo actuado hasta ahora. Hay trabajos que se están haciendo bien, pero las herramientas –el recurso humano- con las que contamos no son lo suficientemente efectivas”, reconoció Garcés.

Afirmó el intendente que “una de las áreas que debemos fortalecer es el Centro de Prevención de Adicciones (CPA) a través de la interacción de diversos organismos”.

¿Sólo drogadependientes?

Según los especialistas, Patagones no es un lugar de residencia de narcotraficantes, pero sí de drogadependientes que cometen delitos para conseguir dinero y con ello poder compras estupefacientes. En pocos días habilitarían un sistema para que los vecinos puedan denunciar anónimamente a los vendedores.

El Jefe de Narcocriminalidad de Patagones (área creada recientemente en el distrito), Marcos Sollberger, describió que su tarea “es diseñar y consensuar con la comunidad políticas de prevención, lo que en definitiva es la solución a largo plazo para el consumo de drogas”.

Anticipó que en los próximos días “daremos a conocer los canales correspondientes para que la gente pueda efectuar denuncias, asegurando que –por exigencia de las leyes- los autores quedarán totalmente respaldados por el anonimato”.

Dijo que “no debemos quedarnos con lo aparente y evidente, que es que alguien vende, sino que hay razones para eso: hay consumidores”.

Sin embargo, subrayó que “la única respuesta real está en la familia y no en el Estado, que tiene la obligación de apresar a quienes venden, pero mientras haya consumidores el negocio seguirá existiendo”.

Subrayó Sollberger que “para que haya narcotráfico, es decir que alguien se enriquezca con la venta de estupefacientes, deben darse una serie de variables. Actualmente estamos viendo si existe en este distrito”.

Mencionó que “los delitos característicos del narcotráfico, como la muerte misteriosa de personas, se presentan en ciudades grandes, pero en sitios pequeños ocurren hechos provenientes de la drogodependencia, que son de menor complejidad. Puede suceder que el adicto que carece de recursos económicos cometa delitos para hacerse de dinero”.

“Aquí el problema existe; estamos tratando de establecer cuál de estas dos modalidades es la que se presenta en la comunidad de Patagones. Por lo que percibo hasta el momento considero que no hay una situación de narcotráfico”, concluyó.