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Según relataron los protagonistas y algunos testigos, el vehículo circulaba por la calle Bynon y fue embestido por una Fiorino, que transitaba por San Martín.
Al parecer el golpe fue en la parte trasera del Fiat Uno, por lo que su conductor perdió el control y fue a dar de lleno contra la calesita.
La dueña de ese juego no encontraba consuelo, ya que el rodado produjo graves daños en diversos elementos decorativos, pero esencialmente en la estructura (eje, cigüeñal, etc.). “Esto es mi sostén de vida y no sé quien se va a hacer cargo…hizo un desastre. Dijo que venía despacio, pero por las consecuencias eso es imposible”, expresó.
La mujer afirmó que el conductor del Fiat le aseguró que tenía una póliza de seguro, pero “todo eso tarda, lleva su tiempo ¿Qué hago mientras tanto?”.
Agregó que en esa misma esquina, hace alrededor de tres años, un automóvil se estrelló contra el suyo, que estaba estacionado. “Este lugar es muy peligroso; no se perdieron vidas afortunadamente hasta ahora, pero puede llegar a pasar, la gente anda como loca”, manifestó.
“¿Dónde está el control urbano, que a uno lo jode todos los días por cualquier cosa? Es imposible que este auto haya venido a 40 kilómetros por hora”, dijo con enojo el hermano de la dueña de la calesita y añadió que el juego –que pesa más de 4 toneladas- se corrió unos 25 centímetros de su eje.
26 junio 2025
Patagones