La Justicia rionegrina resolvió extender por dos meses la prisión preventiva domiciliaria de Isaías Barrera, imputado por el homicidio de Yamil Nahuelcheo, ocurrido el 9 de mayo de 2024 en el barrio Mi Bandera de Viedma. La medida fue adoptada en una audiencia realizada este jueves 24 de abril en el edificio del Poder Judicial de la capital provincial.

Según pudo confirmar este medio, la resolución fue dictada por el juez de Garantías Adrián Dvorzak, quien además dispuso la prórroga del plazo para la investigación penal preparatoria, en el marco del artículo 69, inciso 7, del Código Procesal Penal de Río Negro. La extensión se computará a partir del 26 de abril.

Durante la audiencia, Dvorzak justificó su decisión al considerar que persisten riesgos procesales si se otorga la libertad al imputado. El magistrado sostuvo que, si bien la fiscalía no logró argumentar cómo Barrera podría interferir en una pericia forense actualmente en curso, sí se mantiene la posibilidad de entorpecimiento debido a la existencia de testigos aún vinculados a la causa.

La prisión preventiva continuará en modalidad domiciliaria, con control a cargo de la Unidad de Arresto Domiciliario con Monitoreo Electrónico (UADME), en una vivienda de Carmen de Patagones, provincia de Buenos Aires, donde Barrera permanece desde su detención inicial. La acusación que pesa sobre él es por “homicidio agravado por el uso de arma de fuego”.

La audiencia contó con la participación de la fiscal del caso, Paula de Luque, el abogado querellante Diego Sacchetti, la defensa del imputado a cargo de Claudia Pichiñan junto a Damián Torres, y el propio Isaías Barrera.

Desde el inicio de la investigación, las partes han mantenido posiciones divergentes sobre la hipótesis del caso y las medidas cautelares. Mientras la fiscalía impulsa la extensión de la prisión preventiva con base en la gravedad del hecho y la etapa de la investigación, la defensa ha insistido en que no existen elementos suficientes para mantener esa condición, considerando además el contexto en que ocurrió el hecho.

El crimen de Nahuelcheo tuvo lugar en horas de la noche en una intersección del barrio Mi Bandera. La instrucción judicial intenta determinar las circunstancias del hecho y la posible intencionalidad del disparo que causó la muerte del adolescente.

En los próximos dos meses, la fiscalía deberá avanzar con la recolección de evidencia restante, incluyendo pericias y declaraciones testimoniales, con miras a una eventual elevación a juicio. Mientras tanto, Barrera permanecerá con tobillera electrónica y bajo estricta vigilancia domiciliaria.