El invierno se siente con fuerza en Viedma, y tanto el Hogar de Tránsito Monseñor Enrique Angelelli como la Secretaría de Desarrollo Humano del Municipio redoblan esfuerzos para contener a las personas en situación de calle y a las familias más vulnerables, en medio de un escenario marcado por el frío polar, el aumento de la pobreza y la precariedad habitacional.

“Estamos casi con plaza llena, con una concurrencia muy amplia, especialmente cuando cae la noche y ya no se puede estar en la calle”, explicó Eugenia Rodríguez, responsable del Hogar de Tránsito. La institución, destinada a varones sin techo, adelantó su horario de ingreso a las 17 horas y permite a los alojados retirarse recién cerca de las 9 o 10 de la mañana, para que no deban exponerse al frío intenso.

Rodríguez indicó que los perfiles que llegan al hogar son diversos, pero en esta etapa predominan personas con consumos problemáticos, en muchos casos egresadas o excluidas de otros espacios como los Hogares de Cristo. También hay personas indocumentadas, trabajadores golondrina o mochileros sin destino fijo.

“Estamos articulando con el Registro Civil, Salud Mental, el hospital y también con la policía, porque muchos atraviesan situaciones complejas. Hay un trabajo cotidiano para reconstruir lazos familiares o facilitar pasajes para quienes puedan volver a su lugar de origen”, detalló Rodríguez.

El hogar tiene capacidad para 10 personas, pero se flexibiliza ante urgencias. Además de la cena y el desayuno, intentan entregar viandas para el mediodía, aunque están necesitando tuppers, camperas, bufandas, guantes y mochilas. “Cuando no tienen qué comer, muchos terminan haciendo fuego en la costanera. Por eso es importante que podamos sostener esta ayuda”, sostuvo.

Por su parte, el secretario de Desarrollo Humano del Municipio, Mario Sánchez, señaló que el frío recrudeció la situación social y aceleró la demanda de asistencia directa en barrios sin acceso a gas. “Estamos reforzando la entrega de leña, alimentos y vales de gas. La prioridad son las 1200 familias que viven en barrios populares como Malvinas, Esperanza, San Juan, Unión, Puente Viejo, entre otros”.

Sánchez advirtió que muchas viviendas presentan instalaciones eléctricas precarias y se calefaccionan con estufas a leña o artefactos eléctricos inseguros. “Eso genera incendios, como el que atendimos recientemente. Intervenimos también en esos casos, porque las condiciones son muy riesgosas”, aseguró.

Desde la Municipalidad informaron que el equipo social también está trabajando junto al programa Carlos Cabrera y los centros de salud para acercar vacunas, medicamentos y controles a personas con afecciones respiratorias. “El objetivo es acompañar desde todos los frentes, porque más abajo de la pirámide social no hay nadie. Es una obligación del Estado estar presente”, afirmó Sánchez.

Mientras tanto, el Hogar de Tránsito mantiene su rol de contención, con acompañamiento psicológico, admisiones diarias y contacto con familiares. “Tratamos de que sea un espacio de tránsito real, donde quien llega pueda encontrar algo más que abrigo”, concluyó Rodríguez.

Para colaborar con la campaña de abrigo, se pueden acercar donaciones al Hogar ubicado en la zona céntrica de Viedma, o comunicarse con la Secretaría de Desarrollo Humano