La Asociación Sindical de Salud Pública de Río Negro (Asspur) participó de una nueva reunión de la Mesa de Salud con autoridades del Ministerio de Salud provincial. El encuentro estuvo marcado por el reclamo de recomposición salarial que viene sosteniendo el gremio, ante lo que consideran una pérdida progresiva del poder adquisitivo de los trabajadores del sector.

La referente local de Asspur, Marisa Albano, expresó que la expectativa central de los trabajadores es obtener “respuestas serias y concretas en materia salarial”. Según detalló, el gremio exige una recomposición porcentual y rechaza el esquema de sumas fijas planteado por el Gobierno.

“Hoy la canasta básica familiar ronda los 1,8 millones de pesos y todavía hay trabajadores de salud que perciben entre 1 y 1,7 millones en las categorías más altas. La brecha es muy grande y necesitamos una recomposición que refleje esa realidad”, sostuvo Albano.

La dirigente también señaló que persisten reclamos históricos vinculados con la regularización del pago de horas extras y guardias, compromisos que —aseguró— el Gobierno había prometido atender desde junio pero no se cumplieron. “La anterior mesa fue devastadora para los trabajadores porque no hubo propuesta alguna, y lo que se ofreció en horas extras fueron porcentajes miserables”, cuestionó.

Albano recordó que los esquemas de liquidación anunciados por la Provincia generan rechazo en distintos sectores, ya que evocan situaciones similares a lo sucedido con la Ley 1904. “Estamos esperando volver a reunirnos en asamblea para que los trabajadores manifiesten sus inquietudes, porque hay muchas observaciones que no fueron atendidas”, indicó.

El gremio ratificó que continuará exigiendo un aumento general que supere las ofertas actuales y que permita recomponer el salario frente a la inflación, sin perder de vista la actualización de los montos destinados a guardias y horas extras.