El director general de Investigaciones Judiciales, comisario inspector Rubén Ralinqueo, brindó detalles sobre el operativo que culminó el domingo pasado con el hallazgo de un cuerpo en Viedma. El procedimiento se inició el jueves anterior, cuando se activó el protocolo de búsqueda de personas a partir de una denuncia por paradero.

Según explicó, se realizaron relevamientos en terminales, centros de salud, entrevistas a allegados, toma de testimonios y recolección de imágenes de cámaras de seguridad. La investigación apuntaba a una persona con la que la víctima había pactado un encuentro, identificada como “David” en redes sociales.

El rastreo condujo a un domicilio de calle Gasquet, en el barrio San Martín, donde se constató la presencia de una bicicleta vinculada con la persona buscada y otros elementos de interés. “Se realizaron allanamientos y, con el apoyo de canes, se marcó un sector del inmueble. En una de las habitaciones se activó el protocolo correspondiente, tanto dentro de la vivienda como en la vía pública, por lo que se restringió el tránsito en la zona”, indicó Ralinqueo.

En la etapa inicial, la causa estaba caratulada como averiguación de paradero, pero tras el hallazgo se modificó a homicidio. El comisario inspector confirmó que la pesquisa se inició a partir del testimonio de la denunciante, quien refirió que el encuentro con “David” estaba vinculado a la venta de estupefacientes.

Ralinqueo destacó la coordinación entre la Fiscalía interviniente y la Brigada de Investigaciones, así como el trabajo del gabinete de Criminalística. “Se recolectaron múltiples registros fílmicos de la zona y se actuó de manera profesional para preservar el cuerpo y las pruebas”, señaló.

La investigación continúa con la toma de testimonios y el análisis de evidencias para esclarecer el hecho.