El secretario adjunto de la Unter, Gustavo Cifuentes, explicó los motivos que llevaron al gremio docente a confirmar un paro de 48 horas para el martes y miércoles de la próxima semana, con movilización provincial en Viedma y actividades locales en las distintas seccionales. La decisión fue tomada por el plenario de secretarios generales tras la última paritaria, en la que el Gobierno no presentó una propuesta salarial que el sindicato considerara aceptable.
“La definición estaba clara desde el Congreso: si no había una propuesta analizable, había que poner fecha al paro”, afirmó Cifuentes. Según indicó, la oferta presentada —1% de aumento mensual en junio, julio y agosto— está lejos de lo que el sindicato considera necesario para superar la línea de pobreza. “Un maestro que recién se inicia hoy cobra alrededor de un millón treinta mil pesos, cuando la canasta básica está en un millón trescientos mil. Lo venimos diciendo hace rato: ningún docente debería estar por debajo de la línea de pobreza”, insistió.
El dirigente cuestionó además la dinámica de las negociaciones salariales. “Muchas veces el Gobierno busca dilatar los tiempos con cuartos intermedios, como ocurrió en esta ocasión. Se intentó convocar una reunión paritaria justo antes del Congreso para postergar definiciones. Pero el Gobierno sabía que el mandato era claro”, señaló. “Nosotros propusimos retomar el diálogo el jueves, pero no íbamos a aceptar un cuarto intermedio hasta el viernes, porque eso implicaba seguir estirando un conflicto que el Ejecutivo debería haber evitado con una oferta seria”, agregó.
Cifuentes reconoció que el paro se desarrolla en una semana particular —con dos feriados—, pero sostuvo que la decisión no responde a especulaciones políticas sino a un malestar creciente en las escuelas. “No es solo por el salario. También hay un fuerte agotamiento en la docencia, problemas con las auditorías médicas que están generando caos en las instituciones, y una creciente violencia escolar sin respuestas claras por parte del Ministerio”, enumeró.
El sindicalista apuntó también a la necesidad de que se respete el régimen de licencias vigente. “Sabemos que derogar las auditorías médicas no será sencillo a corto plazo, pero lo que sí se puede hacer ya es cumplir a rajatabla con la resolución 233. No puede seguir pasando que docentes enfermos trabajen por temor a que no se les reconozca la licencia o que las suplencias no se cubran porque no se habilitan por uno o dos días”, dijo.
Frente a las críticas por la coincidencia del paro con una semana corta, Cifuentes fue categórico: “No es lo ideal, nadie quiere un paro. Pero es la herramienta que tenemos. Y si hay enojo en las familias, que miren hacia el Gobierno: ya advertimos hace tiempo que este conflicto podía evitarse si había voluntad de resolverlo”.
Finalmente, consultado sobre el proceso electoral interno del sindicato, señaló que aún no hay una fecha definida, pero que el tema será abordado próximamente por el Consejo Directivo. “Hoy la preocupación está puesta en destrabar este conflicto que el Gobierno generó. Ojalá podamos retomar el diálogo con propuestas concretas y razonables”.
19 julio 2025
Gremiales