Luego de las lluvias y debido a la obra de cloacas las calles quedaron absolutamente intransitables, ocasionando numerosos trastornos a los vecinos.

Hoy el intendente recorrió las calles y dispuso dedicar todos los esfuerzos de las maquinarias viales del Municipio a atender la situación del Álvarez Guerrero y también del sector Nehuén.

También hubo reuniones con la junta vecinal, que mostró su preocupación. Se dispuso un cronograma especial de recolección de residuos, ya que el ingreso de camiones generaría aún más trastornos.

Las labores serán en principio paliativas y se irán haciendo en las zonas donde ya se enterraron las cañerías, con repaso y colocación de macadán.

El Municipio esperaba realizar los trabajos de base al finalizar la obra de cloacas, para poder hacer primero todas las pruebas hidráulicas. Sin embargo, la extensión de las tareas en el tiempo (que están avanzadas en un 90 por ciento) acelerarán los plazos para el arreglo de calles.

En el lugar se está llevando a cabo una de las obras más importantes del servicio de desagüe cloacal, que beneficiará a más de 600 familias. Se trata de una de las obras más costosas de la ciudad.

Esta obra demandó un movimiento de suelo muy importante, y a pesar de ser tapadas las cañerías, requiere de un plazo para su asentamiento. Las fuertes lluvias de ayer generaron fuertes trastornos.

Las maquinas iniciaron los trabajos por la calles donde esta finalizada la obra. Allí también se colocará macadán, que llevará la empresa que está realizando la obra de cloacas.

En este marco, se acordó con la empresa un trabajo conjunto para que la firma provea el material calcáreo y el Municipio ponga a disposición las máquinas.