García, quien se hizo cargo de la empresa hace poco tiempo, dialogó con FM DE LA COSTA y confirmó que “están funcionando” todos los aireadores de la planta de tratamiento de efluentes cloacales.

La queja de los vecinos de Viedma que en los últimos días percibieron olores nauseabundos en distintos sectores de la ciudad -particularmente el centro y la costanera- apuntaron a Aguas Rionegrinas. La novela de la planta depuradora que no funciona ya la vivieron anteriormente.

“Suele pasar que se tiran materiales a la cloaca, como pañales o ropa, que terminan en la laguna de transformación y van rompiendo los equipos, pero hoy están todos funcionando como corresponde”, ratificó García.

Dijo, no obstante, que la planta ubicada sobre ruta 1, a pocos kilómetros del centro de la ciudad, está “en los límites de funcionamiento” y confirmó que el año que viene “habrá que pensar en una nueva obra para el 2014”.

En este marco, García aseguró que “algunos días, por el sentido de los vientos, se nota que los olores no pertenecen a nuestra planta” y admitió que “una de las probabilidades” es que se trate de la pileta de decantación usada por la empresa FRIDEVI, en la parte trasera del terreno.

“Ayer, por ejemplo, se sentían otros olores que no serían de nuestra planta”, agregó García y aclaró que “a Aguas Rionegrinas no le corresponde controlar” la situación del frigorífico.

De esta manera, García ratificó el informe elevado por el subgerente Regional Este de ARSA, Carlos Rodríguez, quien realizó una recorrida por el lugar ante las quejas de vecinos.

El documento, al que pudo acceder LA PALABRA, señala que “el sistema de aireación está funcionando al 100%” y que “se observa que industrias que rodean nuestra planta son generadoras de olores”.

El mismo informe establece que “la cantidad de líquidos que a la fecha ingresan a la planta (aproximadamente unos 950 centímetros cúbicos por hora) están dentro del rango de procesamiento”.

Además, indica que la cloración es “correcta” y que “los mantenimiento faltantes son producto de la falta de ampliación de la planta para poder sacarla de servicio”.

En este marco, sobre la construcción de la nueva planta, dijo que “se debe estudiar el impacto ambiental y ver como se puede reubicar” y explicó que la estructura actual “aguanta un año más, porque estamos dentro de los límites y siempre con mucho mantenimiento”.

“Ya está en ejecución el plan director que incluye la evaluación del traslado o alguna otra alternativa que exista. Buscamos un espacio más alejado y que sea próximo al río, pero por ahora no sabría decir en que lugar podría estar”, señaló el titular de la empresa rionegrina.

Señaló que esta situación no es exclusividad de Viedma y criticó la “desinversión” de los últimos. “En general las plantas funcionan muy al límite en todas las ciudades. Estamos en una etapa de proyectar crecimientos y traslados de plantas de líquidos cloacales, así como también de tomas de agua”, señaló.