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Una familia volvió a reclamar para que la Ligar Rionegrina de Fútbol (LRF) autorice a una niña de 11 años de edad a participar de los torneos oficiales con su club.
La incomprensible medidas de la LRF ya se había intentando imponer hace dos años, pero gracias a la lucha de la familia de Ámbar, se habilitó a que tanto ella, como otras niñas, puedan seguir participando de los torneos.
Ahora, desde la entidad que organiza los torneos oficiales de fútbol en la región se volvió a comunicar la misma decisión.
Según explicaron Sebastián Santa Cruz y Lorena Fontao, papá y mamá de Ámbar, "No la dejan jugar por ser nena, porque no existe la posibilidad de que nenas y nenes jueguen juntos según el reglamento de AFA".
Agregaron que "en realidad el reglamento no lo dice así específicamente, pero no hay intención de redactar una normativa que permita que esto suceda".
Lorena y Sebastián explicaron que "no hay un solo argumento para que esto no se permita. Ambar, como tantas otras niñas, vienen jugando con sus compañeros varones desde hace años".
"En el caso de Ambar desde los 6 años, hasta el presente con 11 años. Nunca existió ningún problema ni en su club ni en los partidos por campeonato oficial jugando con otros nenes. No hubo problemas con los entrenadores, ni con los árbitros, y mucho menos con los compañeros de uno y otro equipo".
"Ambar juega al futbol todos los días, en todos los escenarios, en el club y en el barrio, en la playa o en la calle. Lo hace con quien sea, con nenes y nenas de todas las edades. Si se lastima o se lesiona, será parte de su experiencia, de su crecimiento, al igual que el de cualquier otra persona", indicaron los familiares de la niña.
Recordaron que "la primera vez que se prohibió la inclusión de Ambar en un campeonato fue cuando cumplió 9 años. Los argumentos fueron los mismos, pero gracias a la insistencia, a la presión de los medios y al acompañamiento de su club, se logró que le permitan jugar por dos años más".
"A partir de ese momento, fueron muchas las nenas que volvieron a jugar en un club ya que habían dejado de hacerlo cuando se encontraron con la prohibición. Muchas otras comenzaron a hacerlo desde entonces, motivadas por saber que no sólo podrían entrenar sino también competir", remarcaron.
Los familiares de la pequeña explicaron que "hoy la Liga Rionegrina no responde los pedidos en los que solicitamos que Ambar y el resto de las niñas de nuestra región puedan seguir jugando. Directamente no nos brinda respuesta y amenaza al Club que ella integra si es que seguimos reclamando".
"No se está haciendo un pedido indefinido. Se está planteando la posibilidad de un futbol inclusivo, donde los niños puedan jugar juntos hasta los 14 años como se hace en tantas otras disciplinas", expresaron la mamá y el papá de Ámbar.
Más adelante, agregaron que "las diferencias de contextura física (si es que las hubiera) no pueden seguir siendo la excusa para prohibir a las niñas a seguir disfrutando del deporte que eligieron".
"Desde la AFA se viene promoviendo el futbol femenino y son muchas las voces que piden que se permita que los niños y niñas jueguen juntos hasta esa edad".
"Estamos convencidos de que las niñas tienen derecho a seguir compitiendo con sus compañeros, con los que vienen jugando desde hace años. También estamos convencidos de que la prohibición es una enorme injusticia que debe ser subsanada. Ningún niño debería pasar esta situación y si un reglamento (o un artículo de un reglamento) dice lo contrario, entonces es momento de modificarlo. La Convención sobre los Derechos del Niño nos habla del “interés superior”.
Los familiares de Ambar consideran que "la actual decisión de la Liga rionegrina es discriminatoria y excluyente, porque hoy no existe una liga femenina para niñas de su edad. Y ese interés superior, siendo este su deseo y su derecho, no puede ser pisoteado por ningún reglamento".
En este sentido, proponen que "la Liga Rionegrina sea pionera en el país reglamentando y permitiendo que las niñas y los niños entrenen, se diviertan y compitan juntos hasta la edad de 14 años".
"La infancia es ahora. Seguramente si se incentiva y se estimula que las niñas jueguen al fútbol, en un futuro la cantidad de jugadoras permitirá que haya una liga de nenes y otra de nenas. Mientras tanto, sólo existe la posibilidad de una decisión que no sea lesiva para sus derechos: déjenla jugar", finalizaron los familiares de Ámbar.
12 diciembre 2025
Viedma