Los primeros camiones de exportación de cebolla partieron hacia Brasil, con la certificación fitosanitaria de SENASA desde Conesa, luego de ponerse en marcha la Zona Operativa Aduanera.

Ese control está ubicado en la Ruta Nacional N° 250, a cinco kilómetros de la localidad conesina, donde está proyectado el Parque Industrial. El objetivo es facilitar y simplificar la exportación de productos agropecuarios.

Los principales beneficiarios serán los pequeños y medianos productores de cebolla para exportación de la zona. En los próximos días, cuando esté habilitada la balanza de la Rural homologada por AFIP, se van a poder pesar los camiones que quieran pasar por la Aduana.

Entre lunes y martes de la semana que viene se estará en condiciones junto con la Aduana de exportar desde esa localidad.

Una vez que se cumpla ese requisito se abrirá la posibilidad de que comiencen a construir los galpones de empaque. De esa manera se realizará el empaque directamente en Conesa, se carga en el camión, se genera el control fitosanitario con Senasa y Aduana, y automáticamente se exporta.

El avance genera amplia expectativa en toda la zona, incluyendo Mayor Buratovich y Pedro Luro (en el sur de Buenos Aires).

La coordinadora de Proyectos Municipales, Valeria Campastro destacó que existe la obligación de que la cebolla se certifique en origen y que a partir de estas concreciones en Conesa se podrá hacer Aduana en la localidad y una vez que llega la carga a la frontera con Brasil se vuelve a hacer Aduana en el vecino país.

En cuanto a la producción y la rentabilidad dijo que están mejorando los precios y que hay muchos compradores, en especial brasileños interesados a partir de esta habilitación.

“Hubo problemas sanitarios pero va mejorando, este habilitación va a impactar fuertemente en todo el Valle de Conesa, Valle Inferior, Valle Medio y Villarino”, aseguró. Resaltó la importancia de que no se pierda valor agregado del empaque mediante la certificación en origen y afirmó que se abre una “ventanilla clave para exportar e importar” lo que calificó como una “piedra fundacional” para el la actividad agrícola del Valle de Conesa.

Enfatizó la trascendencia de las herramientas que el Estado Municipal pone al servicio de la cadena productiva mediante gestiones con el gobierno nacional. “Tenemos solicitudes de despachantes de aduana para exportar productos de diferentes localidades, Río Colorado, entre otras”, afirmó.

Calculó que existen unos 300 productores de cebolla en el valle y que a partir de la problemática del agua en Villarino creció fuertemente la superficie sembrada en esa zona rionegrina y en el Idevi, pasando de unas 2000 a 3500 hectáreas.