A través de un comunicado el Frente Grande planteó el apoyo y acompañamiento al paro y movilización convocado por las centrales obreras, los diferentes gremios que la componen y los movimientos sociales.

Bajo el lema "La Patria no se Vende" expresaron su “repudio al DNU y a la denominada ley Ómnibus impulsada por el gobierno nacional que”, según el partido, “atentan contra las bases de la democracia, el bienestar de la población y ponen la bandera de remate sobre la soberanía nacional”.

“La brutal devaluación, los aumentos desmedidos de precios y servicios, el congelamiento y retraso de los salarios, los despidos masivos y el incipiente desguace del Estado sólo son el comienzo de un plan de destrucción y entrega del patrimonio nacional frente al cual el pueblo argentino debe levantar la voz y expresar su más enérgico rechazo” afirmaron desde el partido.

También señalaron que “la contundencia de la medida de fuerza y su carácter pacífico, serán la manera de llamar la atención a un gobierno que se muestra insensible al sufrimiento del pueblo y cerrado al diálogo ante las demandas y cuestionamientos de la oposición en el Congreso”.

Advirtieron que “el gobierno ultraderechista, contraviniendo la Constitución Nacional, busca establecer un modelo económico, político y social dependiente de los grupos económicos locales y extranjeros más concentrados. Asimismo destacan que “las políticas de Milei pretenden avasallar los derechos de los trabajadores, jubilados y sectores vulnerables, afectando también a la clase media, a los comerciantes y a las pequeñas y medianas empresas”.

Por último, manifestaron su “preocupación por las privatizaciones de empresas públicas estratégicas, la eliminación del límite de compra de tierras a extranjeros y la supresión del límite de la plataforma marítima continental, considerándolo una entrega de los recursos naturales del país”.