Fue en el marco de la actualización en el análisis de información sanitaria, de la que participaron los responsables de esos nodos, la jefa de Epidemiología de Río Negro, Odila Arellano y el coordinador Nacional de Vigilancia Epidemiológica, Julián Animan.

Al dar la bienvenida a los asistentes, el secretario de Políticas Públicas de Salud de Río Negro, Daniel Manoukian, destacó la trascendencia que tiene la información elaborada “sobre una base científica sólida” para la toma de decisiones en el ámbito sanitario.

“El seguimiento epidemiológico nos permite un diagnóstico más preciso para tomar decisiones más acertadas. Hay menos posibilidad de error cuando se decide sobre una base científica sólida”, sostuvo.

Durante dos días, se trabajó en aspectos de funcionamiento del Sistema Nacional de Vigilancia de la Salud (SNVS), donde se centraliza la información epidemiológica generada por cada provincia, y el instructivo para el software de análisis offline generador de consultas (GECO).

En las jornadas de trabajo, Salud entregó a cada Nodo una computadora portátil e impresora para fortalecer su trabajo de vigilancia.

Al encabezar la entrega del equipamiento informático, el Secretario Manoukian resaltó que el Plan de Salud que desarrolla la Provincia “no puede alimentarse correctamente si no tenemos información fiable, que surge del trabajo de cada uno de los nodos de vigilancia epidemiológica” que conforman la red rionegrina.

“Nos basamos en un enfoque no solo social, político, económico, sino –básicamente- en pensar qué le pasa a la comunidad que asistimos”, dijo.

Asimismo, destacó que “la vigilancia epidemiológica es esencial para poder tener información precisa, de manera de aportar al rediseño permanente que hay que hacer de los planes de Salud.”

En ese marco de análisis, Manoukian hizo referencia al análisis epidemiológico de El Bolsón respecto a diarreas estivales, en el que informó que “se observa cómo fue bajando la incidencia de casos de esta patología”.

Apuntó que “siempre miramos a la epidemiología con las malas noticias de un brote, pero lo de El Bolsón es una buena noticia que tiene que ver con la prevención y el trabajo en el primer nivel de atención, básicamente, por el seguimiento ordenado, preciso y perseverante desde epidemiología”.

Por su parte, el coordinador Nacional de Vigilancia Epidemiológica, Julián Antman, destacó el valor del equipamiento informático entregado y adelantó que se continuará trabajando con Río Negro para la habilitación de nuevos nodos.

“La idea es poder descentralizar más la información, la que evaluamos conjuntamente con las provincias. Es la primera vez en el último tiempo que se hace una entrega como esta, porque se trata de herramientas de trabajo más que imprescindible”, indicó.