31 octubre 2012 Viedma Comentar

La ciudadana manifestó que, en el hospital de Viedma,  a su esposo lo hicieron esperar mucho para atenderlo,  a pesar de haber indicado que ya había sufrido un ACV en otra oportunidad. Debido a la no inmediata atención se dirigió a otro centro médico donde lo internaron y luego de tres horas lo mandaron al hospital siendo que en ese centro de salud, según la reclamante, no contaban con un neurocirujano.

Al Ministerio de Salud se le corrió traslado del reclamo y se le requirió información acerca de las políticas de prevención que lleva adelante esa cartera y de qué forma las implementa.

También se solicitó información sobre si existe un protocolo de atención a los ciudadanos que se presentan con síntomas de ACV, saber si el personal de enfermería recibe capacitación con respecto a esta temática y si existen estadísticas en Río Negro que indiquen la cantidad, tipo, consecuencias y otras categorías, de casos de accidentes cerebro vasculares que se producen en el territorio rionegrino.

Por otra parte, se solicitó a la obra social provincial IPROSS indique cuál es el tipo de cobertura que brinda a loa afiliados en estos casos, teniendo en cuenta que la reclamante aduce tuvo que esperar noventa días para que le autoricen la rehabilitación.

La Dra. Nadina Díaz remarcó: “No basta con abordar el tema priorizando la disminución de los factores de riesgo, sino que también es necesario un diagnóstico precoz y una adecuada atención en los primeros auxilios para aquellas personas que sufran de un ACV”.

Según el Ministerio de Salud de la Nación, en la Argentina los accidentes cerebro vasculares provocan unas 14.000 muertes al año y es la primera causa de discapacidad permanente en adultos y la segunda causa de muerte en Argentina y en el mundo. Las Naciones Unidas consideran al ACV una de las epidemias de este siglo.

“La difusión de información, las políticas de prevención, los tratamientos en tiempo y forma y, sobre todo, el compromiso de los actores tanto gubernamentales como asociaciones de la sociedad civil, son esenciales para enfrentar estos casos que producen gran conmoción en la calidad de vida de las personas”, indicó la Defensora del Pueblo de Río Negro.