En el marco de la causa que se le sigue a Omar Alberto Acosta, el empleado municipal de Viedma al que se le formularon cargos por los delitos de portación de armas de fuego sin permiso legal, acopio de armas y municiones y por los que se dispuso que sea encarcelado preventivamente por un término de 30 días mientras se colectan pruebas, el municipio viedmense consideró que se trata de una situación causal de despido.

En un comunicado el Municipio de Viedma afirmó que inició una investigación, reunió a la junta de disciplina y abrió un sumario “para establecer las condiciones en las que se habría desarrollado la detención de un empleado municipal, cuando el mismo se resistía a colaborar con la fuerza pública”.

En ese sentido, la subsecretaria de Recursos Humanos, Silvia Calarco indicó que “la gravedad que tendrían los hechos es claramente causal de despido y, en consecuencia, la decisión política de nuestro gobierno es echarlo”.

Calarco informó que el jueves “el empleado municipal fue suspendido en sus funciones y al mismo tiempo detenido por la policía”, y recordó que esta misma persona “ya tenía un sumario en trámite por una causa de acoso a una menor (grooming) por lo que se sumarían estos nuevos hechos agravantes”.

El Ministerio Público Fiscal le formuló cargos el viernes a Omar Alberto Acosta por los delitos de portación de armas de fuego sin la debida autorización legal, acopio de armas y municiones. Se dispuso su prisión preventiva por el término de 30 días, medida que podrá ser revisada.

Además, como el imputado rompió su teléfono celular en instancias en el que el mismo estaba por ser secuestrado en el marco de una causa que se sigue contra él por el delito de grooming, se le imputó también el delito de perturbación en el ejercicio de las funciones públicas.

Los dispositivos informáticos secuestrados en el allanamiento serán peritados por las áreas específicas de la Procuración General y el Poder Judicial buscando avanzar en la investigación específica del ciberdelito.

En tanto, durante el allanamiento en su domicilio fueron encontradas en una de las habitaciones del departamento ubicado en el barrio Inalauquen, vainas servidas, cargadores, cartucherías de diferentes calibres, y más de una decena de armas de fuego cortas y largas (pistolas, revólveres, carabinas, entre otras), cartuchos y frascos con pólvora.