El Concejo Deliberante aprobó por unanimidad el proyecto de Ordenanza para establecer el pase a planta permanente de más de 140 trabajadores de la Municipalidad de Viedma. 

Si bien todos los concejales acompañaron la iniciativa, algunos realizaron planteos vinculados con la denuncia realizada por el Sindicato de Obreros y Empleados Municipales (SOYEM), respecto de que al menos seis ex funcionarios de la actual gestión municipal se encuentran en la lista de los trabajadores que pasarán a la planta permanente. 

Al respecto, el concejal Diego Santos, del Frente para la Victoria, manifestó que "esto es resultado de la lucha por los derechos de los trabajadores por parte de los gremios, pero más allá de que mi voto será positivo, siento la necesidad de aclarar algunos puntos que surgieron durante el tratamiento de este proyecto en comisión". 

Santos agregó que "éticamente no correspondería que quien ejerciera un cargo político nombrado por quien lleva adelante la conducción del Poder Ejecutivo pase a planta permanente, sin perjudicio de reconocer también que son trabajadores". 

El concejal explicó que "estos casos que nos informó el gremio SOYEM, que son trabajadores que poseen un tipo de contrato que le generan derechos, por lo que si no  son contemplados en este pase a planta podrían iniciar acciones legales, y lo único que se lograría sería una pérdida de dinero por parte de las arcas municipales". 

En este sentido, manifestó que "tenemos que tomar las medidas necesarias para que estas picardias no vuelvan a suceder". 

También la concejal del Socialismo, Mariana Arregui, realizó sus planteos.

Consideró que "esto es producto de la lucha de los gremios, por supuesto que hubo un gobierno que tomó la decisión de acompañar, pero siempre revindicamos que los espacios gremiales son los que están en la calle y le ponen el cuerpo a la lucha para generar mejores condiciones de trabajo y de derechos para los empleados y empleados". 

Añadió, además, que "el gremio SOYEM denunció la situación y es importante decirlo porque son cosas que venimos  naturalizando en la política desde hace mucho tiempo, y hasta que no se ponga en discusión no se van a empezar a modificar. Deberemos pensar herramientas que nos permitan que esto no vuelva a suceder".