La emergencia propuesta prevé un plazo de duración de tres años, y tiene como objeto adoptar medidas para garantizar la provisión urgente de agua potable a la población de la zona afectada y evaluar la contaminación de la cuenca, disponiendo medidas destinadas a la remediación y a evaluar el impacto social y económico por contaminación de agua y tierra.
El proyecto presentado surge del pedido de las organizaciones y prevé también que el Gobierno Nacional destine una partida especial para afrontar las acciones de asistencia a los damnificados, suspendiendo por el plazo de vigencia de la emergencia toda obra que implique la toma de aguas de la cuenca hidrográfica del río Jáchal, a la vez que obligándose a remitir al Congreso un informe mensual sobre las medidas dispuestas y el resultado del monitoreo hidrológico periódico.

Asimismo, la futura norma estipula que la Administración Nacional de la Seguridad Social (ANSES) y la Administración Federal de Ingresos Públicos (AFIP), deberán realizar planes de pago especiales, quitas y/o condonaciones a los contribuyentes comprendidos en la zona de emergencia declarada.

Se destaca que la región afectada posee una economía basada en la producción de hortalizas, vides, olivos y explotación ganadera, además de la actividad turística y termal en sus valles. Desde el gobierno nacional, sin embargo, sólo se pretendió minimizar la situación,, reconociendo que en un comienzo habló de un derrame de 15 mil litros, luego de 224 mil litros y finalmente de 1 millón de litros de solución cianurada. Por esta razón, los habitantes de Jachal y comunidades cercanas se encuentran alarmados ante la falta de información y la inminente contaminación con cianuro del agua del rio, lo que ha provocado la paralización de las actividades y la adopción de medidas para abastecerse de agua segura.
 
A la luz de los acontecimientos, resulta más que claro que la mega minería con uso de cianuro y mercurio constituye una actividad que provoca destrucción irreversible del ambiente en el área de la explotación, así como la afectación de ambientes naturales aledaños; graves modificaciones geomorfológicas; la distorsión de las cuencas hídricas y una merma en la cantidad de agua disponible; contaminación del aire; contaminación del subsuelo por drenajes ácidos; peligro de accidentes durante el transporte de sustancias peligrosas y de derrames en el área de explotación; todo lo cual ha generado la presentación del proyecto de referencia.