Promueven ecografías fetales como prestación obligatoria de rutina

Comentar

La norma prevé que las embarazadas que resulten con alguna sospecha de engendrar un bebé con una cardiopatía congénita deberán ser referidas para la realización de la ecocardiografía Doppler color fetal.

La parlamentaria propone que ésta sea una prestación de rutina en todos los establecimientos de atención de la salud, públicos o privados, que tendrá cobertura por las obras sociales, seguros médicos, prepagas y todo organismo financiador de prestaciones, “así como también a la ecocardiografía Doppler color fetal cuando resultare indicado”.

El Ministerio de Salud provincial, como autoridad de aplicación de la presente ley, deberá dotar a los efectores públicos, en forma gradual, de la aparatología necesaria que permita la realización de los estudios, y disponer la capacitación de los médicos ecografistas matriculados en el territorio de Río Negro, para realizar un diagnóstico de sospecha.

Producido el diagnóstico, se realizará la derivación de la mujer embarazada a los centros de salud de mayor complejidad de la provincia donde se hará el diagnóstico definitivo, para luego propender a que el nacimiento del niño tenga lugar en los centros adecuados en respuesta a la patología cardiovascular congénita que padezca, según lo determina el Programa Nacional de Cardiopatías Congénitas que Río Negro integra.

La enfermedad cardiaca congénita es una de las malformaciones más frecuentes, que conforma entre el 0,5 y el 1 por ciento de todas las malformaciones congénitas. La mitad de estas cardiopatías son asintomáticas y la otra mitad puede ser mortal o requerir de cirugía cardíaca.

Explica la autora que el Síndrome de Corazón Izquierdo Hipoplásico es una severa, aunque poco frecuente cardiopatía congénita, con alta morbimortalidad, aunque pasible de tratamiento quirúrgico en el período neonatal (primer mes de vida del bebé), permitiendo que los niños puedan beneficiarse de una buena o muy buena calidad de vida posterior.

Pereira agrega que la ecocardiografía fetal es un método seguro y efectivo para diagnosticar cardiopatías congénitas graves, que puede mejorar el pronóstico de estos pacientes al minimizar “la injuria postnatal, aumentar la accesibilidad al tratamiento, permitir el estudio genético fetal y la preparación emocional familiar, disminuyendo significativamente la morbimortalidad de los niños portadores de estas patologías”.

También afirma, entre otros conceptos, que “no existen riesgos para la madre ni para el bebé en la realización de este estudio, pero sí es de suma importancia detectar cualquier alteración cardíaca que pueda tener el bebé, con o sin antecedentes de factores de riesgo”.

También te puede interesar...