En primer término las autoridades policiales informaron que todas las comisarías cuentan con su personal jerárquico confirmado y detallaron la flamante conformación en cada uno de los sectores de la ciudad.

El Municipio expresó su satisfacción por estas confirmaciones, luego de varias reuniones y pedidos públicos de la comuna por la imposibilidad de encontrar interlocutores estables.

En cuanto a las problemáticas abordadas, se acordó buscar alternativas para planes de desarme. Las autoridades provinciales y municipales, incluyendo a los concejales, se comprometieron a gestionar la posibilidad de una nueva llegada del programa de desarme que promueve Nación.

Otro de los temas abordados fue la venta de alcohol, sobre todo en casas particulares. Se acordó un trabajo conjunto de la Policía y el Municipio en este sentido, y la posibilidad de modificar las penas establecidas en la normativa. También se solicitó a los vecinos formalizar las denuncias de manera anónima en la Municipalidad o al teléfono 911.

También el Municipio gestionará los fondos que están garantizados por ley para los consejos locales, en procura de apoyar el accionar del Consejo con campañas de difusión directas.

Hubo coincidencia, además, en que junto al aspecto de control, preventivo y represivo que puede llevas adelante la Policía y la comuna, se debe acentuar la coordinación en los aspectos sociales y de alternativas barriales.

En este marco, una de las cuestiones tratadas, luego de un planteo vecinal, es la falta de conformación de consorcios en algunos barrios FONAVI.

Para los próximos encuentros, finalmente, se convino convocar a la Justicia y a la Procuración para conocer y coordinar normativas y acciones.