Se prohibirá el uso de bolsas plásticas después de las vacaciones de verano

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Luciano Videla, titular del área de Comunicación del Municipio, confirmó que la decisión de terminar con las bolsas “está tomada” y que solo queda fijar un fecha exacta que será después de la temporada estival.

Videla señaló que la encuesta desarrollada hace pocas semanas “es una forma de darle seguridad a la medida y concienciar a la gente”. En este marco, destacó el resultado del sondeo realizado en supermercados y comercios chicos.

Los datos señalaron que el 89% de los 400 vecinos encuestados  mostró su predisposición a dejar de usar las bolsas “camiseta” y sólo un 6% se declaró algo o del todo reticente con esta posibilidad. Además, el 64% expresó que estaría dispuesto a utilizar bolsas domésticas y un 30% dijo que las reemplazaría con el uso de changuitos familiares.

“Es una encuesta direccionada a los consumidores de estas bolsas. La encuesta es un paso más en un camino que ya se inició hace tiempo, con charlas con comerciantes, llevando concientización y explicando que en algún momento hay que terminar con estas bolsas”, señaló el funcionario.

“La idea es que todos se sumen. Hay ciudades que lo han implementado y eso hace que sea más sencillo el trabajo de concientización. La encuesta apuntaba a los vecinos y nos sorprendieron algunos datos”, agregó.

Explicó que la eliminación de las bolsas generaría un problema secundario, dado el uso que se le da para la recolección de residuos. Detalló que el objetivo es “lograr que se usen los contenedores, aunque en algún caso se comprarán bolsas de consorcio con precios promocionales o se usarán cajas de cartón para juntar los residuos hogareños”.

Explicó también que “se deberá reformar” la ordenanza de sustitución de bolsas que fue sancionada hace tiempo y estimó que “los grandes supermercados cambiarán sin problemas, pero los comercios medianos tendrán algunos inconvenientes hasta que se acomoden”.

Resaltó que el gran objetivo del Municipio es que “no solo el comercio no de la bolsa, sino además que el vecino no la pida”.

Finalmente, dijo que según relevamientos de la comuna se usan unas 30.000 bolsas diarias, que tardarán más de 120 años para que biodegradarse. “Si logramos reducir en un 90% ese uso, sería una ganancia muy importante”.
 

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