CTA Río Negro reclama a los Gobiernos que dejen el servilismo y defiendan la soberanía nacional

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En tal sentido, la CTA provincial, como no puede ser de otra manera, acompaña y respalda la lucha que lleva adelante la Asamblea en Defensa del Agua y la Tierra –y el pueblo bolsonero en su conjunto- que desde hace varias semanas mantiene un acampe pacífico y popular contra el Loteo en la Reserva Natural Cumbreras de Mallín Ahogado y Pampa de Ludden que pretende desarrollar la empresa Laderas SA, vinculada al mencionado magnate.

La reserva del paraje Mallín Ahogado fue declarada reserva natural por la importancia que tiene como zona de recarga hídrica y cabecera de cuenca inter-jurisdiccional y binacional. Pero, con este proyecto, se planean lotear 750 hectáreas, generando 1067 lotes, centros comerciales, hoteles, lagos artificiales y hasta un aeropuerto privado.

“Todo este proyecto está viciado de corrupción, arreglos, compra de voluntades y violencia. Desde el Gobierno Nacional hasta el Municipal se arrodillan ante los millones de Lewis y son cómplices de la destrucción de esta reserva, sin importarles en lo más mínimo la voluntad popular”, señaló Manuel Hermida, Secretario Adjunto de la CTA Autónoma de Río Negro y agregó: “El Gobernador Weretilneck defienda a ultranza a Lewis, Macri viaja a descansar a las tierras que le regalaron a este pirata y el Intendente de El Bolsón, Bruno Pogliano, hasta el momento asumir fue su contador”.

En este camino de irregularidades, tanto la Municipalidad –desde el Poder Ejecutivo y el Concejo Deliberante- como la Provincia no movieron un dedo para hacer cumplir con las leyes y los fallos judiciales que pretenden poner a raya los avances del empresario británico sobre la soberanía nacional.

Es más, custodiado por los violentos de las fuerzas antitumultos COER, el Deliberante local  aprobó el 16 de diciembre pasado el loteo de Laderas SA, mientras unas 6000 personas protestaban en las calles.

Cabe destacar que, incluso, en un hecho ilegal y que debería ser anulado por la justicia estas tierras fueron fiscales hasta el año 2010 y fueron vendidas –mediante una maniobra de triangulación- por la irrisoria suma de 69 pesos la hectárea.

Este sábado 7 de enero el pueblo volverá a marchar -pese a las mentiras, las presiones, las patotas y los atentados, en defensa del agua y la vida.

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