Destacan en el senado el trabajo de la Fundación ANYARC de Viedma

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En enero de 2013, los fundadores comenzaron a buscar otras familias con niños en tratamiento, para que se les unieran en la campaña de juntar firmas y acompañar la solicitud de un médico onco-pediatra, que ayude a todos los niños y adolescentes rionegrinos diagnosticados.

En la actualidad y como resultado de las reuniones mantenidas con autoridades del Ministerio de Salud, se ha logrado la presencia de un Onco-pediatra que atiende mensualmente en el Hospital Zatti, y que en lo sucesivo agregará más localidades a su atención profesional.

Una vez lograda la presencia del especialista, se comenzó a pensar en las familias que viajan desde el interior de la provincia al control onco-pediátrico de sus niños. Para ellos, formaron una red de contención ya que la localidad debe brindar un espacio físico, con actividades recreativas y alojamiento.
Se prioriza desde la Fundación la facilitación de los canales correspondientes, para que el niño acceda al tratamiento adecuado en el tiempo indicado, generando y arbitrando, junto a otras instituciones, los medios necesarios para que ese niño se pueda acomodar, de una forma más saludable, a los cambios que provoca la enfermedad.

Desde la fundación, se explica a familiares y amigos, la evolución del niño; además, se brinda información relacionada con el cuidado de los hermanos sanos -en casos de que los hubiera-, y como resolver la situación laboral, teniendo en cuenta que muchos de los pacientes diagnosticados en el interior del país, deben tratarse en Buenos Aires, con todo lo que ello significa, separarse de sus bienes y de sus afectos.

Los objetivos de la Fundación ANYARC son: promover el mejoramiento en la calidad de atención en los centros asistenciales; atender a las necesidades psicosociales del niño y adolescente enfermo de cáncer y su familia a lo largo de las distintas etapas de la enfermedad; facilitar el acceso a los recursos en casos de emergencia que permitan la continuidad del tratamiento en tiempo y forma; ofrecer información de utilidad acerca de los distintos aspectos relacionados a la enfermedad; ayudar y albergar a las familias del interior de la provincia; apoyar y desarrollar aquellas actividades relacionadas con la concientización social respecto a la enfermedad; alentar, organizar y llevar a cabo todo tipo de actividades que tiendan al mejoramiento de la calidad de vida de los niños y adolescentes con cáncer; defender los derechos de los niños y adolescentes enfermos de cáncer.

Por la importancia de la labor solidaria de esta fundación la parlamentaria rionegrina solicitó a sus pares legislativos, recibiendo respuesta favorable, la aprobación del reconocimiento.
 

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